El AcaMoto, un mal necesario para Acapulco?

Texto y Fotos: Hanzel Zarate de la O

Hay eventos y actividades que logran unificar criterios en Acapulco y uno de ellos sin duda es el AcaMoto, evento que desde el gobierno de Felix Salgado Macedonio se realiza sin interrupciones cada año y que edición tras edición a logrado el repudio de los acapuqueños gracias a las molestias que causan sobre todo en la vialidad e inclusos otros señalan que ofenden la educación y buenas costumbres al convertir la zona de la condesa en una cantina gigante en donde hasta se exhiben desnudos totales de algunas acompañantes de los motociclistas y del consumo de drogas como la marihuana, además de que toman por asalto las calles del puerto sin respetar nada ni a nadie poniendo en riesgo no solo sus vidas si no la de los automovilistas que se encuentren circulando por donde ellos pasan, casi siempre a exceso de velocidad y con una actitud agresiva y en algunos casos hasta violenta.

Pero la moneda tiene dos caras y una de las caras es la de la derrama económica que hace que este evento sea esperado por los prestadores de servicios de todos los ámbitos, desde los que venden sus artesanías en la playa hasta hoteles importantes de la Zona dorada, mismos que durante el fin de semana que dura dicho evento reportan su ocupación al 100 por ciento, motivo por el que ellos, los hoteleros y restaurantes, no externan inconformidad alguna por que Acapulco sea sede cada año del AcaMoto.

Es así como se tienen dos realidades, una, el AcaMoto es un evento que trastoca la legalidad y le da verdadera impunidad a los miles de motociclistas que llegan a Acapulco, a tal grado que se sienten con el derecho de violar cuantas leyes se les antoje ante la mirada de aprobación de las autoridades municipales y estatales que prefieren voltear para otro lado mientras no suceda alguna desgracia que lamentar y que les pueda traer consecuencias políticas, y la segunda realidad es que el AcaMoto provocó que la Zona Dorada registrara una ocupación hotelera del 97.7 por ciento, ocupación que ni en Semana santa se logró, dejando una derrama económica arriba de los 22 millones de pesos solo en dos días, por lo que hoteles como El emporio, Playa Suite, Fiesta Americana, El Copacabana y otros más reportaron el 100 por ciento de ocupación en sus cuartos, ayudando así a que Acapulco en general presentara una ocupación total del 85.2 por ciento, significando más de 13 puntos por arriba del año pasado gracias a los casi 19 mil cuartos que se ocuparon.

Es momento en que las autoridades de los dos niveles de gobierno se coordinen para poder regular el uso de las vitalidades cundo se realice el AcaMoto, pues aunque es verdad que dejan una derrama importante, también es verdad que no deberían bloquear la libre circulación vial afectando el trabajo y la vida cotidiana de los acapulqueños y de los turistas que no gustan de este tipo de espectáculos, pues el comportamiento de la mayoría de los motociclistas que participan en este evento podría causar, en un futuro no muy lejano, acciones que afectarán aún más la imagen del puerto, imagen que ya de por si esta muy afectada, surgiendo aquí la pregunta, El AcaMoto es un mal necesario para Acapulco?.

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